Continuamos con el repaso a lo que ha dado de sí la temporada en la mejor liga de baloncesto del mundo, la NBA. En este artículo analizamos la División Central de la Conferencia Este, integrada por los siguientes equipos: Chicago Bulls, Indiana Pacers, Milwaukee Bucks, Detroit Pistons y Cleveland Cavaliers.
Chicago Bulls:
Regular Season: gran salto cualitativo de los jóvenes Bulls en este curso. Tras ya varias temporadas de progreso constante, los toros han conseguido volver a comandar la clasificación de la liga regular, algo que no lograban desde los tiempos de un tal Michael Jordan. El United Center de Chicago ha sido uno de los fortines más inexpugnables de la NBA, y el equipo, combinando un buen quinteto titular con un muy honroso banquillo, obtuvo merecida recompensa al gran trabajo realizado durante todo el año. Así, los Bulls obtuvieron el mejor récord de toda la liga, con 62 victorias y 20 derrotas, comandando la Conferencia Este y logrando el título de la División Central aplastantemente.
Playoffs: tras una Regular Season excepcional, todos esperaban grandes cosas de estos Chicago Bulls. Y han hecho un gran papel, quedándose a las puertas de la que hubiera sido su primera Final NBA desde 1998. Los hombres de Tom Thibodeau tuvieron una primera ronda plácida, derrotando por un contundente 4-1 a Indiana Pacers, uno de sus rivales de división, que a punto estuvo de ganar para sí el factor cancha en el primer partido de la serie, más igualada de lo que nos dice el resultado. En la segunda ronda esperaba Atlanta Hawks, uno de los equipos más molestos y correosos del Este, que dio más guerra de la prevista al mejor equipo de la temporada, llegando la serie a seis encuentros, con la victoria de los favoritos Bulls por 4-2. Fue en la Final de Conferencia donde el bonito cuento de hadas bull vio truncado su final feliz, encontrándose Chicago con unos Miami Heat realmente intratables. Un Big Three (James, Wade y Bosh) gigantesco no permitió a Rose y compañía realizar el juego visto durante toda la campaña, con un resultado final favorable a Miami de 1-4. Final de curso algo agridulce para un equipo que ha demostrado haber encontrado la llave del éxito y que seguirá estando, sin duda, en la élite de la NBA en las temporadas venideras.
Expectativas y conclusiones: Chicago se ha reencontrado con el éxito tras largos años de idilio con éste en el pasado. El equipo ya venía avisando de su potencial en las últimas temporadas (todos recordamos esa excitante serie de primera ronda ante Boston en los Playoffs 2009) y la bomba de relojería terminó explotando este curso. Si añadimos al poderío de la pareja titular interior (Boozer y Noah) el buen trabajo de jugadores como Luol Deng, Kyle Korver o Taj Gibson, hay un resultado satisfactorio en la suma. Pero si a todo esto adjuntamos un plus de tanta profundidad como es el de la confirmación de Derrick Rose como uno de los mejores jugadores de baloncesto del planeta, tenemos un equipo muy competitivo ante nosotros. Y así ha sido. El «Syrius» de The Allan Parsons Proyect ha vuelto a sonar con fuerza en el United Center. La furia roja ha regresado para quedarse.
Jugadores destacados:
Derrick Rose: podríamos utilizar cientos de adjetivos para definir la temporada del MVP de la liga este curso, todos ellos con valoración muy positiva. El base natural de Chicago (circunstancias del destino) ha cuajado un año espectacular en todos los sentidos, jugando un baloncesto de delicatessen. Anota, asiste, da espéctaculo, el balón no le quema en las manos. Su juventud es su mejor baza, porque eso significa que todavía nos quedan muchos años para seguir disfrutando con su talento. El título no llegó esta vez, pero seguro que le veremos con más de un anillo de campeón NBA en el futuro.
Carlos Boozer: llegó a Chicago el pasado verano, procedente de los Utah Jazz, donde se consolidó como uno de los mejores interiores de la Conferencia Oeste. Su primer curso en los Bulls ha sido muy satisfactorio, aunque se perdiera ciertos tramos de la liga regular por lesión. Ha formado una pareja interior letal con su compañero Joakim Noah. El pick and roll con Rose ha funcionado siempre a la perfección, Boozer no falla en su terreno habitual. Si él y Noah están sanos, hacen mucho daño.
Luol Deng: si Rose es el Michael Jordan de los Chicago Bulls del siglo XXI, Deng es el equivalente a Scottie Pippen en los mismos términos. Segundo máximo anotador y pasador del equipo, buen tiro exterior, tesón y perseverancia. Ya lleva varios años en la disciplina bull, y es uno de los líderes del vestuario. El caballero inglés no defrauda a nadie.
Jugadores decepcionantes:
Hay tres jugadores en la actual plantilla bull que no acaban de dar el do de pecho: CJ Watson, Kurt Thomas y Rasual Butler. El primero no convence mucho como base suplente de Rose y el segundo y el tercero están ya muy lejos de su mejor rendimiento.
Rookies: el turco Omer Asik ha sido el único jugador novato en los Bulls esta temporada. Aunque no haya jugado mucho, no ha estado mal cuando ha tenido minutos y no es mal complemento de Boozer y Noah.
The Coach: una de las mejores virtudes de los Bulls 2010/2011 es que saben atacar y defender. De que hayan desarrollado una formidable actitud defensiva tiene gran culpa su entrenador, Tom Thibodeau, otrora entrenador asistente en equipos como Boston, Nueva York o Philadelphia, y siempre dedicado a la parcela defensiva. Él ha conseguido conjuntar definitivamente todas las piezas del puzzle bull correctamente y ha sido galardonado por ello con el premio al Mejor Entrenador este curso. Su primera temporada en la Ciudad del Viento no será la última.
Futuro: el porvenir de los Chicago Bulls tiene una pinta estupenda. Aunando juventud y talento como ya lo han hecho, seguirán caminando por una senda apacible. Podrán mantener a buena parte de su roster, también a su principal estrella, Rose, que de momento parece decidido a llevar a la gloria a Chicago cueste lo que cueste. Sería bueno que reforzaran el puesto de base suplente y que dieran salida a los jugadores marginales (pocos) de la plantilla, dando entrada a otros hombres más útiles.
Indiana Pacers:
Regular Season: los Pacers no han sufrido un salto de calidad gigantesco este año, mejorando en cinco victorias su anterior registro. Después de cuatro temporadas sin Playoffs, Indiana ha vuelto a ocupar un lugar entre los 16 mejores equipos de la liga, obteniendo un récord de 37 victorias y 45 derrotas, segundos de división y octavos de la Conferencia Este. Mantuvieron una dura pugna con Milwaukee y Charlotte por entrar en la postemporada hasta casi el final de la Regular Season.
Playoffs: el regreso a la lucha por el título del equipo presidido por Larry Bird fue efímero, cayendo en primera ronda del Este ante el mejor equipo de la Regular Season, Chicago Bulls (4-1). Aun así, batallaron más de lo esperado y pusieron las cosas difíciles a sus rivales de división.
Expectativas y conclusiones: el principal objetivo de Indiana era volver a las eliminatorias por el título, algo que se ha logrado este curso. Lo mejor es que su equipo ha entrado en los playoffs con hombres, y no con nombres. Ninguno de los jugadores del roster pacer son grandes estrellas de la NBA, y su plantilla no tiene demasiada entidad, siendo la peor de las 8 que competían representando al Este en la fase eliminatoria. El primer paso para recuperarse de 4 años con vacaciones anticipadas ya está dado.
Jugadores destacados:
Danny Granger: ha bajado sus números anotadores respecto a las dos anteriores temporadas, pero sigue siendo la estrella y referente del equipo. Sin embargo, su imagen pública ha perdido muchos enteros (o debería) gracias a unas declaraciones realizadas el pasado verano cuando disputaba el Mundobasket de Turquía con la selección nacional estadounidense, en las que dijo que los europeos no usaban desodorante y olían a burros muertos. Para rematar la faena, añadió que en su estado de origen, New Orleans, olía igual.
Tyler Hansbrough: tras un año rookie decepcionante y una primera parte de su año sophomore más o menos parecida, el ex jugador de la Universidad de North Carolina, con una carrera universitaria espléndida a sus espaldas, logró demostrar su valía como jugador de baloncesto y remontar un poco el vuelo tras el parón del All Star. Todavía está lejos de ser el hombre que deslumbró a la NCAA con la camiseta de los Tar Heels, pero su recta final de año ha sido ilusionante. Su tercera temporada con los profesionales nos hará salir de dudas.
Roy Hibbert: otro jugador joven con proyección que juega en las filas de los Pacers. Ha ido in crescendo desde que llegó a la liga, consolidándose como pívot titular en Indiana. Está llamado a formar una dupla interior interesante con su compañero Hansbrough, ya han dado muestras de ello.
Jugadores decepcionantes:
Se llevan esta «honrosa» designación TJ Ford y Jeff Foster. Ford, el hombre que tantos quebraderos de cabeza diera a José Calderón en Toronto, no pasa por un buen momento en su segunda etapa en el equipo, lastrado sobremanera por las lesiones y muy alejado de la titularidad que en su día atesoró. Algo parecido le pasa a Jeff Foster, que de ser intocable en el quinteto inicial pacer ha pasado a ser un suplente cualquiera.
Rookies: Paul George no ha tenido malos números en su primer año en la NBA y Lance Stephenson ha jugado un papel marginal en el equipo, disputando sólo 12 partidos de los 82 de la Regular Season.
The Coach: tras la marcha de Jim O’Brien como entrenador jefe a mitad de curso, su asistente Frank Vogel cogió las riendas de los Pacers en su primera experiencia como «head coach». Nadie confiaba en él, pero logró que el equipo acabara la liga regular con balance positivo y también el ansiado billete para disputar los playoffs. Si a eso le añadimos lo mal que se lo hizo pasar Indiana a Chicago en primera ronda, parece que el cambio fue para mejor.
Futuro: los días en los que Indiana luchaba por el anillo de la NBA se acabaron hace mucho tiempo. Éste es un equipo perfecto para servir de trampolín a jugadores jóvenes que quieren crecer como baloncestistas, aunque hay varios hombres de la actual plantilla que ya tienen unos cuantos años encima. Lo ideal sería que se trabajara con un equipo más joven todavía, dejando de lado a algunos veteranos entrados en años y fichando savia fresca y nueva. Es fundamental que este equipo sea el estandarte baloncestístico de un estado, Indiana, para el que el deporte de la canasta es una religión y un estilo de vida.
Milwaukee Bucks:
Regular Season: Milwaukee ha bajado sus prestaciones este curso. Han obtenido 9 victorias menos que en la anterior campaña, quedándose fuera de playoffs cuando todos esperaban que el equipo, dada su plantilla, se clasificara para los mismos. El balance final de los Bucks fue de 35 victorias por 47 derrotas, terceros de la División Central y noveno mejor equipo del Este, muy lejos de la sexta plaza que ocuparon en la temporada 2009/2010 (Nueva York, sexto clasificado de la conferencia, obtuvo 7 victorias más).
Playoffs: no clasificados.
Expectativas y conclusiones: fracaso absoluto de los Bucks en su ya temporada pasada, donde no fueron capaces de obtener el pase a la postemporada aun mostrando gran parte del roster buck un notable rendimiento. Todos esperábamos grandes cosas de esta plantilla, al menos sobre el papel, pero la cancha se ha encargado de poner a todos en su sitio. Una plantilla muy digna, que parecía totalmente carne de playoff (y más peleando por ello durante todo el curso) acabó hastiada y pidiendo las vacaciones a gritos. Los objetivos marcados no se cumplieron y se tiró por la basura el trabajo de toda una temporada en los compases finales de ésta. Temporada para olvidar.
Jugadores destacados:
Brandon Jennings: su año sophomore ha sido ligeramente peor a su primer año en la NBA, pero el base titular de los Bucks sigue siendo, de largo, la estrella del equipo. Máximo pasador y anotador de los ciervos, su baja durante buena parte del año pudo lastrar mucho las opciones de postemporada de Milwaukee.
Andrew Bogut: otro jugador al que los problemas físicos le dan muchos quebraderos de cabeza. Aun así, el número 1 del draft de 2005 nunca ha defraudado desde que llegó a la plantilla buck y mantiene dobles cifras anotadoras y reboteadoras. Uno de los líderes del equipo.
Carlos Delfino: puede que algunos de sus compañeros le hayan sobrepasado estadísticamente, pero el argentino ha tenido un gran año, siendo el alero titular del equipo en 40 ocasiones y consiguiendo los mejores números de su carrera NBA. Por fin ha podido trasladar su gran rendimiento con Argentina a la mejor liga de baloncesto del planeta.
Jugadores decepcionantes:
Muchos jugadores de Milwaukee han estado a un gran nivel este año (Ilyasova, Gooden, Maggette, Boykins), con algunos casos que incluso resultan sorprendentes. Sin embargo, también ha habido tiempo para las decepciones. El máximo exponente de la desgracia personificada en un jugador de baloncesto es Michael Redd. El que en otro tiempo fuera uno de los referentes del equipo, gran tirador e incluso miembro de la selección de USA mantiene una batalla permanente con las lesiones, que le han permitido disputar muy pocos partidos (10) esta temporada. Pese a ello, mostró unos números dignos, lejanos empero a sus mejores momentos como integrante de los Bucks.
Rookies: el único debutante del roster buck durante la temporada ha sido Larry Sanders, que no lo ha hecho mal cuando ha dispuesto de tiempo en la cancha.
The Coach: el desastroso final de liga regular de los Bucks, que les impidió entrar en la lucha por el anillo, todavía es un misterio sin resolver. Scott Skiles no pudo remar frente a las circunstancias adversas que las lesiones provocaron en su plantilla y al final acabó pagándolo caro. Y eso que las cosas no le habían ido mal en el transcurso del año.
Futuro: Milwaukee es una de las franquicias NBA a la que más le pùede afectar el posible lockout (cierre patronal) de la liga, ya que en sus filas hay varios jugadores internacionales. Es más, ha quedado claro que, de producirse el aplazamiento del inicio de la temporada, Brandon Jennings y Ersan Ilyasova volverían a Europa (Delfino les acompañaría casi con total seguridad). Incluso puede que el ala pívot turco salga del equipo en verano de vuelta al Regal FC Barcelona, en el que ya militó durante dos temporadas a un gran nivel. Así pues, parece que los Bucks tendrán mucho trabajo este verano.
Detroit Pistons:
Regular Season: los Pistons no han mejorado mucho sus registros pasados, volviendo a ser uno de los equipos punteros de la NBA empezando por el final de la tabla. Han conseguido 3 victorias más que en el curso pasado, obteniendo un resultado de 30 victorias y 52 derrotas, cuartos en su división y undécimos clasificados del Este.
Playoffs: no clasificados.
Expectativas y conclusiones: en la ciudad del autómovil y de la Motown se vive un auténtico proceso de reconstrucción. Pocos vestigios quedan ya del equipo campeón de la NBA en 2004 y subcampeón en 2005. Sólo 3 jugadores de aquella plantilla (Tayshaun Prince, Richard Hamilton y Ben Wallace) sobreviven hoy en el equipo. Los Pistons son un hervidero de jóvenes que todavía necesitan foguearse más, junto con jugadores más veteranos y expertos. No hay grandes estrellas en su plantilla, y el vestuario es uno de los más comprometidos de la liga, como ha quedado demostrado en varias ocasiones durante la temporada, con un entrenador al que los jugadores han cuestionado públicamente y al que no respetaban. Ante tal polvorín, la lógica ha hecho mella y los Pistons son ahora mismo un equipo sin rumbo fijo, sin capitán y sin timón.
Jugadores destacados:
Tayshaun Prince: es el mejor jugador de los Pistons actualmente, aunque corran tiempos difíciles. Nunca ha sido un hombre destacado en el conjunto de la NBA, siempre ha sido un jugador en la sombra, secundario, que juega para el equipo.
Richard Hamilton: pese a que los años ya hacen mella, «Rip» intenta seguir al pie del cañón. Su año ha sido un tanto irregular, pero sigue siendo uno de los hombres más destacados y trabajadores de Detroit. Apura sus últimos años como jugador de baloncesto.
Greg Monroe: una de las sorpresas más agradables de los Pistons esta temporada. Ha tenido un año rookie muy bueno, siendo ya el jugador interior más destacado de la plantilla y pilar fundamental de los proyectos de futuro de la franquicia.
Jugadores decepcionantes:
El único hombre cuyo rendimiento ha sido deplorable al 100% es Tracy Mcgrady, irrecuperable ya para la causa baloncestística. Sus números distan mucho de los que logró en su día en Toronto, Orlando y Houston. Si a esto le unimos su condición de agitador número uno del vestuario, ya lo hemos dicho todo.
The Coach: el banquillo de los Pistons es uno de los menos deseados de la NBA en estos momentos. John Kuester no ha podido domar a los Bad Boys de ninguna manera esta temporada, gozando de una nula autoridad en el vestuario. Sus jugadores llegaron a reírse de él en un partido en el que fue expulsado, le han criticado públicamente en más de una ocasión, algunos pesos pesados del equipo tuvieron sus más y sus menos con él y, en definitiva, todos deseaban con fervor que Kuester desapareciera de sus vidas. Sus deseos se han hecho realidad, ya que el malogrado entrenador no continuará la próxima temporada.
Futuro: el principal objetivo de Detroit es obtener algo de provecho en el próximo Draft. Elegirán en octava posición, asi que podrían escoger a algún jugador interesante. Bismarck Biyombo, ex jugador del Baloncesto Fuenlabrada de nuestra ACB, sería un refuerzo muy acorde al tipo de jugador interior que vemos en este equipo. Se dice que será Top 10, asi que si lo tienen a mano no deberían desaprovechar la oportunidad, y más después del Nike Hoop Summit que realizó.
Cleveland Cavaliers:
Regular Season: el año post Lebron ha sido especialmente duro para los Cavs, que han pasado de estar en posesión del mejor récord de la NBA en la temporada 2009/2010 (61 victorias y 21 derrotas) a ser el peor equipo de la Conferencia Este, el último clasificado en la División Central y también el segundo peor equipo de toda la liga, con un récord de 19 victorias por 63 derrotas. Además, Cleveland tiene a partir de esta temporada el muy «gratificante» honor de ser el equipo con la peor racha de derrotas consecutivas (26 partidos) de toda la historia de la NBA. Los Cavaliers también son, desde esta temporada, el equipo que ha encajado la derrota de mayor diferencia histórica en la mejor liga baloncestística del mundo (112-57 ante Los Ángeles Lakers).
Playoffs: no clasificados.
Expectativas y conclusiones: temporada nueva, vida nueva, y más si uno de los emblemas de la NBA, Lebron James, se marcha del equipo después de 7 cursos vistiendo los colores de los Cavaliers. No fue el único. Zydrunas Ilgauskas, otro clásico de los Cavs, y Shaquille O’Neal, que llegó la temporada anterior como plus para acercarse más al anillo, también dijeron adiós al equipo del estado de Ohio (más tarde también saldría de la franquicia su base titular, Mo Williams, otro jugador importante). Así, con nuevos roles para casi la totalidad de la plantilla y con nuevo entrenador (Byron Scott), Cleveland vivió una temporada en la que las sombras predominaron sobre las luces. A final de curso las cosas comenzaron a ir algo mejor, e incluso algunos de los jugadores jóvenes que ahora son multitud en la franquicia (Eyenga, Hickson, Gibson, Sessions) mostraron buenas aptitudes. El año post Lebron ya pasó.
Jugadores destacados:
Antawn Jamison: le tocó asumir el liderazgo del equipo en la cancha tras la marcha de James, y no defraudó. Aunque ya no es tan joven ni mantiene el gran rendimiento mostrado en los Washington Wizards, ha manejado buenas cifras estadísticas. Es un buen anotador y reboteador.
Baron Davis: llegó al equipo en febrero gracias al mercado de traspasos y a una operación conjunta entre su equipo, Los Ángeles Clippers, y Cleveland. No es el Davis de los buenos tiempos, pero por lo menos su aportación ha sido aceptable en los partidos disputados con los Cavs, rindiendo a un mejor nivel que en los Clippers.
J.J. Hickson: portavoz de los jóvenes de la franquicia, que son multitud, a Hickson le ha sentado bien contar con una mayor importancia en el equipo, promediando buenas cifras anotadoras y reboteadoras. Será importante si Cleveland mantiene esa apuesta por la juventud que parece querer llevar a cabo.
Jugadores decepcionantes:
Quizá se esperaba una mayor aportación de Anthony Parker al contar con más minutos, también algo más de tiempo en cancha para ciertos jugadores, etc. Anderson Varejao, pieza clave de los Cavaliers desde ya, no ha podido demostrar toda su valía este curso debido a sus problemas físicos. Cuando esté totalmente recuperado, debe ser uno de los hombres importantes del proyecto de los Cavs.
Rookies: 5 ha sido el número de jugadores novatos que ha albergado Cleveland en sus filas esta temporada. El mejor de todos ellos ha sido Samardo Samuels, seguido de cerca por el ex ACB Christian Eyenga, jugadores ambos que comenzaron el curso jugando en la NBDL debido a la poca confianza del entrenador Scott, aunque finalmente se ganaron un sitio en el roster de los Cavs. Manny Harris aprovechó sus minutos de juego (jugó 54 partidos) y Semith Erden y Luke Harangody, que llegaron al equipo a mitad de temporada merced a los traspasos, tuvieron una suerte dispar: el primero empeoró su rendimiento y el segundo mejoró sus prestaciones.
The Coach: año duro para Byron Scott, que sabía, como todos, que la marcha de Lebron sería durísima de asumir. A pesar de todo, el equipo consiguió salvar un poco los muebles y no ser el peor equipo de la liga (lo fue Minnesota). Además, el ex entrenador de los New Orleans Hornets fue dando poco a poco más oportunidades a algunos de los jóvenes de la plantilla cav, consiguiendo una buena comunión entre veteranos y jóvenes. La mala noticia para Scott es que ahora ya no sólo será recordado por su formidable paso por los Lakers del Showtime (como jugador), sino que también se le recordará como el entrenador del equipo que cosechó una mayor racha de derrotas consecutivas en la historia de la NBA.
Futuro: después de conseguir, contra todo pronóstico, ser el poseedor de la primera elección del Draft 2011 en la lotería previa al sorteo, Cleveland debe ir de cabeza a hacerse con alguno de estos grandes jugadores universitarios: Kyrie Irving, Derrick Williams o Brandon Knight, que forman el que presumiblemente será el podio del draft venidero. El primero, según los «mock drafts» especializados, es el que más papeletas tiene para ser nuevo integrante del equipo de Ohio.